El 60 aniversario de la muerte de Eva Duarte de Perón será recordado este jueves con actos políticos, misas, colocación de ofrendas y eventos artísticos, como muestras fotográficas, murales, paseos y visitas a lugares históricos y charlas públicas.
El Justicialismo tendrá su ceremonia principal en José C. Paz, donde está invitada la presidente Cristina de Kirchner. Ese recordatorio fue organizado por el Consejo del PJ paceño, que conduce el exintendente local Mario Ishii. El acto se realizará a las 16 en el Mercado Concentrador, ubicado en la exruta 197 (actual ruta 24), entre las calles Pichincha y Carrasco, lugar donde funciona un mercado de productos alimenticios y un paseo de compras.
Además de Cristina, Ishii y el jefe comunal actual Carlos Urquiaga, estarán el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, y funcionarios nacionales y provinciales. Allí también se desplazarán las agrupaciones La Cámpora, Movimiento Evita, Peronismo Militante, MILES, Corriente Peronista Nacional, Corriente Nacional de la Militancia, Nuevo Encuentro, Kolina, CTA, FOETRA, Corriente Nacional Martín Fierro, Frente Transversal, Frente Grande, Partido Comunista Congreso Extraordinario y Carta Abierta.
María Eva Duarte nació en Los Toldos, provincia de Buenos Aires, el 7 de mayo de 1919. Ella, su madre, Juana Ibarguren, y sus cuatro hermanos formaban la familia de Juan Duarte, que falleció cuando Evita tenía seis años. En esa época se mudaron a Junín, donde Eva permaneció hasta 1935. Con tan sólo 15 años de edad decidió mudarse a Buenos Aires buscando convertirse en una actriz. Sola se enfrentó a un mundo hostil y duro para una jovencita pueblerina. Pero llegó a ser actriz reconocida y triunfó como tal. Sin embargo, su destino era otro.
En enero de 1944, en un festival de la comunidad artística a beneficio de las víctimas del terremoto de San Juan, conoció al entonces coronel Juan Domingo Perón. Allí comenzó la historia que los unió hasta su muerte en 1952.
En febrero de 1946 -tras los episodios del 17 de octubre de 1945-, la presencia de Evita fue fundamental en la campaña electoral del naciente peronismo. Perón fue electo presidente, y el rol de Evita como su compañera de lucha, llegaría a transformarla vertiginosamente en la "Abandera de los Humildes". En su rol de primera dama, Eva Perón desarrolló un trabajo intenso, tanto en el aspecto político como en el social.
En cuanto a la política, trabajó intensamente para lograr el voto femenino, reivindicando a las mujeres en la vida cívica del país. Fue organizadora y fundadora de la Rama Femenina del Partido Peronista (poco antes de nacer el justicialismo). Esta organización se formó con mujeres de distintas extracciones sociales en todo el país.
En el aspecto social, su trabajo se desarrolló en la Fundación Eva Perón, mantenida por contribuciones de empresarios y por donaciones que los trabajadores hacían cuando tenían una mejora en sus sueldos.
Con su intensa e incansable acción al servicio de los que menos tenían, Eva Perón impulsó la creación de hospitales, hogares para ancianos y madres solteras, policlínicos, escuelas, la imponente Ciudad Infantil, y organizaba torneos deportivos infantiles y juveniles.
La otra faceta de Evita, quizás el eje principal de su popularidad, fue su acción en torno a los sindicalistas, y su facilidad y carisma para conectarse con las masas trabajadoras, a quienes ella llamaba sus "descamisados".
Su renunciamiento para acompañar a Perón en la fórmula presidencial para un segundo período de gobierno, marcó un hito en la historia política argentina. En esos días, ya estaba enferma de cáncer, pero su voluntad de seguir sirviendo al pueblo siguió intacta, hasta la última gota de aliento.
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